Mi padre tenía un 600. Como supongo que tenían un 600 la mayoría de los padres de la gente de mi generación.
En él, cabíamos 5 personas, las jaulas de los canarios, la bombona de butano, las maletas de todos, una tienda de campaña enorme, el menaje para un mes, …..
¿Falta mucho papá?, tengo pipi, no molesteis a vuestro padre que está conduciendo, mamaaaaaá dile que pare, me estoy mareando, ¿Falta mucho papá?
Y ¿qué acompañaba a las salidas con el 600? Fácil, la tortilla de patatas, el termo de café y el pollo rebozado.
Pues aquí teneis mi versión vintage de ese manjar viejuno.
NUGGETS DE POLLO
Ingredientes:
1 pechuga de pollo
harina
comino, pimentón picante, pimienta, sal, curry (una cucharadita de cada)
huevo
buttermilk (o leche)
almendras – o pan rallado – para rebozar
Preparación:
En un bol, mezclar la harina con las especies. En otro bol, batir el huevo con el buttermilk.
Picar las almendras peladas pero con cuidado de no hacer una harina. Han de quedar gruesas.
Precalentar el horno a 200º.
Cortar la pechuga en trozos (no muy pequeños – no muy grandes). Salar.
Pasar los trozos de pollo primero por la harina, después por el huevo batido y por último por la almendra picada.
Disponer los trozos de pollo rebozado en una bandeja para el horno cubierta de papel parafinado y hornear 15 – 20 minutos hasta que el pollo esté doradito. Sabe igual de bien, si en vez de hornear los nuggets se frien en aceite caliente.
Y para morirse del gusto, mojar los nuggets en este chutney de melocotón
Música para cocinar: Gladys Knight – Midnight Train to Georgia